Está constituída de feldespato, es la más común plagioclasa y principalmente la oligoclasa, la andesina y la labradorita y tiene un aspecto característico: se observa un centellamiento de pequeñas lentejuelas metálicas en el interior de una masa anaranjada, ésta es la razón por la cual se la ha dado el nombre de piedra del sol, la heliolita.
Este reflejo anaranjado de las lentejuelas es provocado por finas laminillas de hematita o de goethita sobre las que la luz se refleja y da el centellamiento, que a veces puede ser azul o verde. Este fenómeno es llamado también “aventurinescencia”.
Además, los feldespatos plagioclasas presentan a menudo un efecto Schiller o adularescencia/labradorescencia (debida a la superposicion de laminillas de diferentes plagioclasas que interfieren) que se agrega al centellamiento de las lentejuelas metálicas en inclusiones.
La variedad que proviene del Oregon en los Estados Unidos (Oregon sunstone – piedra de sol -) constituída por labradorita y descubierta en los años 1980, contiene micropartículas de cobre en lugar de la hematites la cual refuerza el color anaranjado. Ella puede también ser verde, amarilla, rosa, parda, incolora y a menudo transparente
Es también posible que la piedra del sol esté constituída de otros feldespatos plagioclasas o hasta por feldespatos alcalinos como la microclina o la ortosa.
No hay que confundir este feldespato con el cuarzo “aventurina” que contiene partículas finas de fusquita cuando es de color verde o de mica y de hematita cuando es anaranjada.